Hace unos años, conocí a R. en una academia de Inglés. Yo iba a perfeccionar la pronunciación y ella, que hablaba bien Alemán, intentaba mejorar su Inglés.
Tiempo después, descubrimos una cafetería en la que se reunían personas para hablar en Inglés sobre temas del día a día, con la supervisión de un profesor -que era uno más- quien ayudaba en caso de dudas.
R. viajaba todos los años a Alemania. Allí tenía una amiga a la que visitaba y que la acompañaba para conocer nuevos lugares. De un mercadillo de no recuerdo qué ciudad, me trajo estos gatos de madera.
Se puede pensar que es un puzle de una mamá gata y su gatito. Al menos, eso es lo que a mí me sugiere.
Fue un regalo bonito, mejor que un imán que termina en una caja y es poco original.
Estos gatos puzle de madera están junto a nuestros libros gatunos; a veces encajados y, otras liberados.
Nota.- Igual no es exactamente un puzle. Realmente no sabría buscar otra forma de describirlos...
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario. ¡Miaumuac! ~.~)=