Érase una vez una época en la que salía a la calle con relativa tranquilidad. En la que, después de pasear, me sentaba en una mesa de la terraza de un café y respiraba, sin miedo, el aire contaminado de la ciudad. En la que una pitillera no era pitillera porque guardaba dentro las tarjetas del blog de gata Rassel para, si conocía a alguien a quien le gustaran los gatos, entregarle una y así, nos conociera y visitara.
Érase una vez una época que ya no es. En la que pasar algo de una mano a otra no hacía necesario lavarse inmediatamente. En la que te daban la vuelta de pagar el café y, sin usar gel hidroalcohólico, rompías el papel de la galleta y la comías.
La pitillera ya no es ni pitillera ni tarjetero. Se ha quedado en el fondo de un cajón, como recuerdo de aquellos días que vivimos despreocupados.
"Once upon a time" (Érase una vez) una noche en la que un príncipe besaba a una chica desconocida, sin pensar, a lo loco.
(Relato y fotografías: Etel García)
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario. ¡Miaumuac! ~.~)=