Hay cuatro gatos en Gatitos. Indefensos, tiernos, juguetones, más o menos valientes. Supervivientes teniéndolo todo o nada.
Hay humanos adultos de los que defenderse. Son protectores, pero también manipuladores y, en ocasiones, mentirosos. Por el simple hecho de ser mayores, piensan que "es lo mejor para ti" y "por tu bien" son máximas que hay que cumplir sin analizar las repercusiones que tendrán en los niños.
¿Cómo pueden unos simples gatitos sobrevivir y crecer en un mundo con tantas carencias y peligros? ¿Qué les empuja a luchar, reír, jugar, soñar, crear, ilusionarse?
Ningún niño debería de ser adulto antes de lo debido.
Ningún niño debería de ser adulto antes de lo debido.
Dos gatitos con pelo y garras. Ella blanca y enferma; él negro, querido y cuidado desde el primer instante.
Dos gatitos humanos. Sveta y Dylan viven en mundos muy diferentes y lo que les rodea, forma, en parte, su carácter.
Él tímido, inseguro. Utiliza su desbordada imaginación para crear historias de aventuras con superhéroes, princesas urbanas y malvados.
Él tímido, inseguro. Utiliza su desbordada imaginación para crear historias de aventuras con superhéroes, princesas urbanas y malvados.
Demasiado serio y solitario para su edad, Dylan vive en una ciudad extrañamente limpia, en la que se puede respirar sin miedo y la comida es saludable. Pero su vida, su día a día, se desarrolla en soledad: no tiene amigos en el colegio, sus padres trabajan demasiado, no hay comunicación, todo está programado, incluso sus vacaciones viajando con su tía a lugares en los que no hay, aparentemente, problemas.
Ella valiente, decidida, protectora, madura para sus once años (las circunstancias de la vida aceleraron el proceso), pero sin dejar de hacer cosas de niña.
Ella valiente, decidida, protectora, madura para sus once años (las circunstancias de la vida aceleraron el proceso), pero sin dejar de hacer cosas de niña.
Risueña, irónica, un poco salvaje, nació y vive en un lugar devastado por la contaminación, la despoblación, la resignación y el conformismo.
Un día te puede cambiar el presente y el futuro, además de hacerte descifrar el pasado.
Ese día que pasaron juntos (más bien horas), Sveta le enseñó a Dylan su mundo, su forma de vida, llena de peligros, esfuerzo, enfermedad y muerte, pero con esperanza. Le abre los ojos a una cruel realidad que él no plasmaba ni en sus escritos porque la desconocía ya que sus padres y su tía le proporcionaban un ambiente "agradable". En sus viajes, nunca había visitado un lugar como aquel, en el que los humanos vivían cada día aparentemente despreocupados de lo malo que les rodeaba, sin tratar de mejorarlo, unos marchándose a vivir a otras ciudades si podían, otros resignándose a quedarse allí para siempre.
Gatitos encantará o encandilará a los niños por verse reflejados en Sveta o Dylan. En cuanto a los adultos, espero que les haga pensar sobre cómo estamos protegiendo o desamparando a los niños, a los pueblos, a la naturaleza.
Un día te puede cambiar el presente y el futuro, además de hacerte descifrar el pasado.
Ese día que pasaron juntos (más bien horas), Sveta le enseñó a Dylan su mundo, su forma de vida, llena de peligros, esfuerzo, enfermedad y muerte, pero con esperanza. Le abre los ojos a una cruel realidad que él no plasmaba ni en sus escritos porque la desconocía ya que sus padres y su tía le proporcionaban un ambiente "agradable". En sus viajes, nunca había visitado un lugar como aquel, en el que los humanos vivían cada día aparentemente despreocupados de lo malo que les rodeaba, sin tratar de mejorarlo, unos marchándose a vivir a otras ciudades si podían, otros resignándose a quedarse allí para siempre.
Gatitos encantará o encandilará a los niños por verse reflejados en Sveta o Dylan. En cuanto a los adultos, espero que les haga pensar sobre cómo estamos protegiendo o desamparando a los niños, a los pueblos, a la naturaleza.
Se me ha quedado corta la historia. Espero que Cristina Monteoliva se anime a contarnos más sobre qué hicieron Sveta y Dylan por mejorar su mundo y el mundo.
Título: Gatitos
Autora: Cristina Monteoliva (Almuñecar, 1978)
Editorial Círculo Rojo
Páginas: 139
2 comentarios:
Muchísimas gracias por esta estupenda reseña. Me alegro mucho de que el libro os haya gustado por ahí.
Un abrazo,
Cristina Monteoliva
¡Un placer leer tu libro, Cristina! Aquí seguiremos hablando de gatos de papel. ¡Miaumuac!
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Gracias por tu comentario. ¡Miaumuac! ~.~)=