Siempre que me viene bien, utilizo "Soy de Letras" para justificar que cualquier cosa relacionada con la Ciencia no es correcta o totalmente asimilada por mi cerebro.
Eso no quiere decir que no me atreva a leer una novela como La puerta de los tres cerrojos; que digo yo que si está escrito para niños a partir de 10 años, las explicaciones serán sencillas.
Niko recibió un misterioso mensaje aquella mañana que le hizo ir al colegio por otro camino, haciendo gala de esa frase que dice: "Si quieres cambios, tienes que hacer cosas distintas". Así descubre un caserón con una puerta que tiene tres cerrojos. Para que se abra debe solucionar un enigma que le adentrará en una gran aventura científica con elfos y hadas, ciencia a raudales, amor y amistad. Sorpresas como utilizar el teletransportarse, descubrir que siempre han estado allí, aunque ocultos porque los humanos "no estamos preparados para conocerles y aceptarles".
Por supuesto que hay un gato, y uno muy famoso: el gato de Schrödinger; por ello va a vivir en el blog de Rassel. Niko se encuentra con él varias veces a lo largo de la historia, y será una de las cosas científicas que aprenderá en este fantástico viaje.
Con la lectura de La puerta de los tres cerrojos, he recordado algunos conceptos muy básicos y aprendido otros; aunque no me siento capacitada para hablar de ellos con nadie, para mí se quedan.
Lo he leído gracias a la plataforma eBiblio Asturias. Ya que también está disponible la segunda parte, la tengo anotada en mi agenda para dentro de un tiempo.
Título: La puerta de los tres cerrojos
Autora: Sonia Fernández-Vidal
Editorial Destino
2018
Páginas: 208
Recomendado a partir de 10 años. Recuerdo que yo soy mucho mayor y me ha gustado.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario. ¡Miaumuac! ~.~)=