Las primeras páginas de How to draw cats for kids están inglés, pero las ilustraciones son un tutorial paso a paso en imágenes, por lo que no necesitarás conocer este idioma para poder aprender a dibujar gatos.
En esa introducción nos comenta qué materiales necesitamos, alentándonos a emplear lo que tengamos a mano, además de animarnos a ser creativos añadiendo cualquier complemento que se nos ocurra.
Son un total de 27 gatos en diferentes posturas y formas, y 3 felinos más. La mayoría son fáciles y otros ya un poco más complicados. Ya sabes que es la práctica la que nos ayuda a aprender y mejorar. Eso es lo bueno, que una vez se dominen los dibujos sencillos, podemos seguir avanzado creando posturas de gatos más complejas. ¡Todo un reto!
Una vez terminado el dibujo que más se acerque a nuestras posibilidades creativas, podemos colorearlo y hacer que sea un marcapáginas muy bonito para nuestros libros en papel o para regalar a una persona especial.
Yo ya estoy motivada y utilizo una libreta dedicada exclusivamente a dibujar gatos. Tengo algún que otro problema con las orejas y los ojos, aunque estoy segura que, una vez lo haya dibujado 100 veces, terminaré por hacerlo bien.
Por supuesto, aunque el título parezca enfocar el libro a los niños, tanto su autora como yo consideramos que sirve para cualquier edad porque lo importante es sacar nuestra vena creativa y disfrutar de un momento dibujando, bien solos o en compañía.
